Conexiones marítimas y su influencia en el comercio marítimo antiguo
– Simulaciones náuticas como base de la investigación histórica
¡Navigare necesse est, vivere non necesse est (Original: Πλεῖν ἀνάγκη, ζῆν οὐκ ἀνάγκη)! El historiador griego Plutarco puso en boca del comandante romano Pompeyo este dicho, que significa «la mar es necesaria, pero la vida no». Se dice que este último se lo dijo a unos marineros que, debido a una violenta tormenta, se negaron a zarpar hacia Roma con un carguero cargado de grano. Esta anécdota, cuyo refrán pervive aún hoy como lema marinero, muestra la gran importancia de la navegación marítima para la ciudad de Roma y el Imperio Romano: sin las importaciones de grano, Roma no habría podido sobrevivir, por lo que la vida de los individuos contaba menos que la colectiva.
Las conexiones marítimas son un requisito esencial para el desarrollo de sistemas económicos complejos. A diferencia de las conexiones terrestres, mucho mejor documentadas arqueológica, documental y literariamente, las rutas marítimas y su influencia en los costes de transporte representan un desiderátum de investigación, especialmente para las épocas premodernas. Sin embargo, la base de cálculo debe determinarse en corredores fiables para poder no sólo anticipar, sino también describir concretamente los hallazgos sobre los fenómenos de la globalización. Aunque estos procesos se concentran en épocas recientes, ya son tangibles de forma rudimentaria en la antigüedad. Es precisamente la «perspectiva de larga duración» la que permite observar los efectos sobre la sociedad y la economía que aún no pueden hacerse para el momento actual.
El proyecto «Conexiones marítimas y su influencia en el comercio marítimo antiguo – Simulaciones náuticas como base para la investigación histórica» representa el proyecto a largo plazo de la Universidad de Tréveris para investigar precisamente estos temas, con el objetivo de proporcionar una herramienta de trabajo para la investigación, pero también para un público interesado, mediante el desarrollo de un Atlas Marítimo Digital Interactivo de la Historia (DIMAG), con el que se pueden investigar los flujos de mercancías y las rutas económicas y de comunicación combinando simulaciones de rutas con datos históricos y arqueológicos.
El proyecto, financiado por la Fundación Alemana de Investigación (DFG) y con un periodo de financiación de nueve años, aborda en tres fases de financiación distintos subperiodos temporales y regionales de la Antigüedad. A la exploración del Mediterráneo durante el Imperio Romano (siglos I-III d.C.) siguió el subperiodo clásico-helenístico y con él la apertura de nuevas zonas marítimas como el Adriático, el Atlántico oriental y el océano Índico. En la tercera fase de financiación, la atención se centrará en la Antigüedad Tardía y la región del Mar Negro, así como en las conexiones marítimas del noroeste y noreste de Europa.
El Atlas Interactivo como herramienta de investigación para historiadores y miembros interesados del público estará disponible como un sistema de geoinformación basado en la web en este sitio para la región mediterránea del período imperial romano al final de la primera fase de financiación en la primavera de 2024 y se desarrollará continuamente en el curso de la segunda y tercera fases de financiación.
Objetivos del proyecto
1. Establecer las economías marítimas como objeto de investigación en la Antigüedad con estudios cuantitativos en una nueva perspectiva, en los que el desarrollo metodológico desempeñe un papel central. La atención se centra en el comercio marítimo y los fenómenos de globalización asociados.
Con este fin, se está desarrollando un nuevo método para calcular el curso y la capacidad de las conexiones marítimas, así como la base de cálculo para los empresarios dedicados al comercio marítimo, con la simulación de la antigua marina mercante, y se está demostrando su valor científico mediante su aplicación en las investigaciones llevadas a cabo en el marco del 1.
3) Al proporcionar la base de datos para los cálculos realizados en el punto 2. y la visualización de la simulación en el marco de un «Atlas Digital Marítimo Interactivo de la Historia» (DIMAG), se pondrá por primera vez y a largo plazo un SIG a disposición de la investigación como herramienta de trabajo. Esto también debería ser aplicable a otros campos temáticos más allá de la economía, como la cuestión de la transferencia de personas e ideas o los canales de comunicación.